El nuevo precio de la electricidad en España estará condicionado por varios indicadores, como son la hora, día, mes y lugar de residencia de los consumidores. El cambio es consecuencia de la nueva metodología que ha enviado la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) al Consejo de Estado, que debería entrar en vigor el próximo 1 de enero.
Su puesta en marcha podría suponer una rebaja del recibo de la luz de aproximadamente un 2%. Una vez se efectúe el cambio, se tratará del tercer sistema de fijación de precios de la electricidad para el consumidor doméstico en los últimos cinco años. Actualmente, el 77% de los hogares desconocen que pueden contratar sus tarifas energéticas sujetas a un precio regulado o a empresas a un precio liberalizado.